7 beneficios de participar en un círculo de mujeres

«Cuando un número importante de personas cambia su modo de pensar y de comportarse, la cultura lo hace también, y una nueva era comienza.» – Jean Shinoda Bolen

Los círculos de mujeres son espacios de origen ancestral creados para ofrecer sostén, apoyo y comunicación entre las mujeres.

A través de las culturas se ha encontrado un patrón similar en este tipo de eventos donde no existe jerarquía.

Sí hay facilitadoras de las dinámicas para que las mujeres puedan compartir sentadas  en igualdad de condiciones, conectadas entre sí.

La confección de un altar (representativo de un útero, la gestación) con flores, oráculos, ceremonias de cacao o té es un ritual que casi siempre da inicio a la velada. Luego se determina un tema o intención y se releva de persona en persona la oportunidad de expresarse con sinceridad.

Hay diferentes razones para hacer círculos de mujeres: sanación, comunicación, intenciones de luna nueva, sororidad, menstruación, amor propio y celebración de sexualidad sagrada, entre otros.

Los círculos son importantes porque permiten que las mujeres (y los hombres con sus propios círculos, ej. Carpas blancas) puedan explorar su mundo interno sin miedo a juicios del exterior.

Se provee un espacio de respeto y contención.

Según Sophia Style en Mujer Cíclica, “muchas veces acudimos a un círculo en un momento de transición y cambios, cuando se despierta el anhelo de una conexión más profunda y auténtica con una misma y con la vida.  La propia forma del círculo acompaña ese viaje de introspección, a la vez que nos permite sentir la fuerza y el apoyo del grupo.”

¿Qué beneficios trae participar de un círculo de mujeres? Son múltiples pero aquí te comparto siete que considero engloban el crecimiento espiritual y personal que se vive en estos encuentros:

  1. Conectar o re-conectar con tu feminidad
  2. Expresarte libremente en un espacio seguro y respetuoso
  3. Aumentar tu autoestima e intuición
  4. Conocer mujeres en rutas de vida similares a la tuya
  5. Recibir apoyo y sostén emocional sin juicios
  6. Liberar creencias limitantes
  7. Sanar heridas causadas por co-dependencia de relaciones, imagen del cuerpo, vínculos familiares y más

Cuéntame, ¿ya has participado de alguno? ¿Te animas a coordinar uno para la próxima luna nueva?

Si es así aquí te dejo algunas lecturas relacionadas que te serán de interés:

Qué esconde la danza árabe

Similar al yoga, esta práctica corporal ha sido masificada, estereotipada y condenada por la sociedad.

La pregunta que hay que hacerse es… ¿por qué?

La danza del vientre, danza árabe o el «belly dance», como es conocida en inglés, tiene múltiples beneficios para las mujeres (y los hombres, ¡que también la practican!) tales como: fortalecer el autoestima, balancear los chakras, corregir la postura corporal, mejorar la flexibilidad, trabajar la zona pélvica y abdominal, favorecer la digestión y despertar la sensualidad, entre otros.

Ayuda a desatar y equilibrar la kundalini, aliviar el estrés, abrir la creatividad y reducir tensiones musculares.

¿En qué momento la vimos sólo como algo «bajo», un elemento de «seducción» o «rechazo» para alimentar la mirada de un Otro? 

Este fin de semana fui a la Convención de Belly Dancing de Miami y tras varias presentaciones y las reacciones del público, me hice estas y otras preguntas.

En Latinoamérica, Shakira fue una de las cantantes que más ayudó a popularizar la danza árabe en el continente pero sus presentaciones formaban parte de un espectáculo. La práctica al igual que sus raíces libanesas-colombianas la distinguieron de otras cantantes pop-rock en la industria del entretenimiento sin embargo, esa jugada no incluía honrar la esencia de esta danza.

Entiendo que tampoco era su rol, como artista, defenderla.

Con eso dicho, son pocas las maestras de danza árabe que actualmente, respetan los orígenes «no-seductores» y más transformadores de estos movimientos corporales.

IMG_4615.jpg

Ante la presión porque no se pierda el interés, la mayoría de bailarinas y empresarias recurre a uno de los dos extremos: la técnica o el goce por atención.

A ser muy metódicas y escultoras de sus cuerpos que se pierde la esencia y la diversión o a ser extremadamente coquetas, ruidosas y dispuestas a apropiarse de secuencias de otras culturas sin sensibilidad alguna, todo por hacer un «show».

De ahí que surjan estereotipos que hieren colectivamente a las mujeres que han encontrado en la danza del vientre una forma de liberación.

Creencias y comentarios como:

¿Me vas a seducir?

¿Por qué no me bailas en privado?

A ti lo que te gusta es enseñar los senos y mover el trasero.

Eres peligrosa. ¿Cuáles son tus intenciones?

Si te tienes que vestir provocadora para empoderarte, no eres feminista.

Sin duda, considero que masificar el arte lo destripó de toda emoción para la practicante y no el público espectador. La audiencia se emociona mientras más flexibilidad y más «cachondeo» se exhiba (un poco evocando el morbo silencioso que genera el burlesque).

Es en esta búsqueda de validez externa que se ha perdido la noción de que este tipo de baile permite a la mujer y al hombre empoderarse. Y es que, hasta esa palabra, ni sabemos a ciencia cierta qué significa. La han desgastado tanto que ni creemos en ella.

¿Cómo ayuda al empoderamiento? Enseñándote exactamente lo mismo que cuando aprendes a montar una bicicleta: conciencia de tu cuerpo.

Te permite adueñarte de él.

Una de las primeras lecciones y las principales que rigen el belly dancing tradicional es el movimiento del 8, número, símbolo que representa el infinito.

El abrirte a dar y recibir, mover la energía de adentro hacia afuera y viceversa, forzándote a mantener firme tu centro: el abdomen.

Activa el chakra sacro, el goce y la creatividad. Activa el chakra raíz al pisar fuerte con tus pies descalzos. Activa tu chakra del plexo solar, la voluntad y el «yo puedo», eres merecedora de felicidad, alcanzar lo que te propongas: capaz.

La secuencia de los 7 velos es una de las más preciadas para la transformación consciente así como la danza del sable que permite destruir obstáculos y abrir paso a nuevos caminos.

Novelas como El Clon, versión brasileña y la más reciente Miami-style, centraron el drama y publicidad alrededor del belly dancing. La protagonista, si quiere al hombre, lo seduce primero a través del baile. Si es en colectivo, los hombres esperan que ella haga un show. En la recámara privada, más vale que use los vestidos de colores y los diamantes que le regalaron en una sesión de baile como parte de los preliminares a hacer el amor.

IMG_4628.jpg

El punto aquí es resaltar que la tentación no viene del baile, que no tiene por qué rechazar lo erótico, sino de la construcción de significados que le imprimen ciertas culturas.

Si nos remitimos a sus orígenes, encontraremos que las mujeres en Egipto,  Líbano, España, Turquía, Siria y otros países más interpretaban esta danza de maneras diferentes. En sus inicios no era un baile para hombres sino para gozarlo en círculos de mujeres. 

Hoy es difícil encontrar espacios de instrucción que no intenten objetivizar el cuerpo de las mujeres. Bajo el pretexto de «despertar a la diosa» busquen «empoderarlas», «endosiando» sus cuerpos por lo que provocan en otros y otras. No en los beneficios que tiene la práctica para sí mismas.

«Que mejor algo que nada»,  «que no será yoga de la India pero prefiero que sea moda el yoga light y no los videojuegos», «que la mujer aprenda a ser femenina con el belly dancing a lo reggaeton que con los concursos de belleza», así me han dicho.

Ok, lo que veo con esos planteamientos es que el enfoque está en el «hacer algo» y no en el significado de lo que se reproduce. La solución que se normaliza es un parche. Vender la danza del vientre para la mujer que no se sienta sexy, parche. Para mantener la figura, seducir al marido, volverte más linda, más «empoderada», parche.

Parche si no se atiende la raíz.

IMG_4653Usualmente, quien inicia el belly dancing lo hace porque quiere conectarse con su feminidad. Lo que he visto, como practicante, es que quienes se adentran en la práctica de manera genuina buscan explorar su cuerpo, entender la energía dentro de él y sí, fluir, gozar, reír.

Hay demasiada promoción de lo que provoca en otros el título de bailarina de danza del vientre (admiración, atracción sexual, envidia, estatus) y poca en los beneficios personales que esconde. 

Eso es lo que me preocupa y por tal razón, te planteo esta situación.

Seguramente, la puedes exportar a decenas de otras modas y tendencias de tu preferencia y encontrar similitudes o diferencias.

Te invito a hacerlo y preguntarte: 1) ¿en qué momento ocurrió la distorsión?, 2) ¿qué intereses alimentan? y 3) ¿por qué?

Dualidad y Alquimia

He decidido abrir una nueva sección en el blog para explorar más en profundidad estos dos conceptos: dualidad de energías y alquimia.

Según la RAE, alquimia es

1. f. Conjunto de especulaciones y experiencias, generalmente de carácter 

esotérico, relativas a las transmutaciones de la materia, que influyó en el

origen de la ciencia química y tuvo como fines principales la búsqueda

de la piedra filosofal y de la panacea universal.

De antemano aseguro que no busco la piedra filosofal. No sé si es muy pronto todavía para determinar un fin concreto. A veces uno emprende caminos porque siente un llamado tal y como el Alquimista de Pablo Coehlo.

Pero sí te comento que en los últimos días y con el cúmulo de experiencias a mi alrededor y dentro de mí, escuché el llamado de reconciliarme con mi Shakti, por más esotérico que suene.

En el post La inclusión de los hombres te presenté unas discusiones en círculos de mujeres donde no permitían entrar a los hombres que querían abrazar el femenino también porque iban a «dañar la dinámica». Reflexioné sobre ese separatismo, los miedos y el deseo de control de espacios.

Marinando la idea estos días comprendí que hay sanaciones que las mujeres deben realizar solas y hay otras que sólo en pareja o permitiendo la interacción con hombres pueden ser completadas. Lo mismo con los hombres, hay sanaciones con ellos mismos y su linaje de padre-abuelo-hermano-etc y otras, con la madre, la hermana, la abuela, sus exparejas que sólo pueden realizarse en parejas o en interacciones con mujeres.

Créanme que comprendo muy bien que existen otras identidades sexuales más allá de estas categorías binarias, mujer-hombre, y que el concepto de dualidad puede verse como algo «cerrado».

Sin embargo, yo veo la dualidad como el ying yang, todos la tenemos. Y aquí vuelvo a citar la RAE (no porque sea una fuente súper confiable porque también tiene sus defectos pero bueno…):

1. f. Existencia de dos caracteres o fenómenos distintos 

en una misma persona o en un mismo estado de cosas.

Puede que este espacio creativo que lanzo sea un camino que le interese sólo a mujeres. No puedo obviar que yo, que escribo y emprenderé esta ruta, lo soy.  Sólo puedo asegurar que tengo muy presente a mis lectores hombres/otras identidades en este proceso y que espero que a través de los escritos encuentren prácticas útiles para elevar su vibración hacia el amor o nutrir su andar. Igual en el blog seguiré subiendo contenido de conciencia, viajes y paz en otras secciones.

Para los hindúes, Shakti representa la fuerza universal y la energía femenina. Como bailarina de danza árabe sí he tenido contacto con ella pero no he explorado al máximo su potencial. Me propongo a cambiar eso. En relaciones y en mi carrera usé mucho el arquetipo de Shiva para destruir el universo en aras de reordenarlo o crearlo nuevamente. Me propongo a cambiar eso.

Es mi deseo no luchar más con fuerzas extremas ni opuestas sólo porque una hizo o hace más mal o bien que la otra. Lo veo a diario en mis interacciones con hombres y mujeres cuya energía no me cuadra bien y me alejo. Lo veo en mis amigas que terminan relaciones amorosas y no quieren saber más de los hombres o al contrario, buscan jugar con ellos. Lo veo en hombres que se tornan fríos porque una mujer les rompió el corazón o porque su mamá era muy controladora; o en hombres vivarachos que no respetan a nadie ni tan siquiera a ellos mismos.

Nosotras, ellos, tú, yo: todos merecemos más. 

En una clase angelical a la que asistí ayer, hablaban de este tema. Que merecer es una convicción: «honrar lo que tú eres sabiendo lo que vales».

¿Cómo honramos quiénes somos si no nos hemos dado a la tarea de descubrirlo? De aliarnos con nuestra sombra y no habitar siempre en ella; de aliarnos con nuestra luz y que no nos consuma la existencia.  Veo en coaches de vida y motivación un afán extraordinario porque la gente deje sus «tinieblas» y se abrace a la luz. Veo en otros influencers, astrólogos y emprendedores conscientes una retórica de miedo y «húyele» a tu sombra porque sino vas a sufrir con el fin de crear dependencia de sus seguidores a todo su contenido, productos y servicios.

Hay que romper con esos extremos. Sólo apreciamos la luz cuando estuvimos en la oscuridad. Sólo agradecemos la abundancia y la prosperidad cuando hemos vivido la escasez extrema.

Una ayuda a la otra.

Es reconociendo la importancia de este balance de energías y de miles de otros conceptos en pares que planteo esta ruta.

No estoy completa porque hay partes de mí que me resisto a conocer o dejar a rienda suelta.

No estoy completa porque pienso y siento pero no vivo en total concordancia. 

No estoy completa porque aún no piso fuerte en mi esencia, dudo de mis capacidades, de lo que doy y de mi propósito en este Planeta. 

No quiero usar más el «no» cuando recibo en retribución a lo que doy. 

¿Cómo honro mi valía si no acepto el flujo dual de dar y recibir?

Si solo me enfoco en el dar, en el resistir, en el controlar…

En esta sección trataré temas, experiencias y entrevistas de equilibrio. Rituales no creo compartir porque sé que hay muchísimas páginas con excelente material. Sólo le daré su merecido espacio en mi blog a este proceso alquímico que comienzo para aprender a balancear elementos: energías femeninas-masculinas, cinco elementos, feng shui y más.

Hoy no veo una fecha límite sólo una certeza que si honro quien soy, encuentro mi balance más allá de un alineamiento de chakras, podré compartir más de mí y ser más auténtica con quienes me rodean.

Confiando en que si llegaste hasta esta línea te interese ser parte de este proceso, gracias te doy por leerme.

De hecho, antes de terminar, me quedé con ganas de un nuevo libro para explorar después del reto 21 días Volver al amor, inspirado en la obra de Marianne Williamson. 

Estoy casi convencida de empezar When God was a Woman de Merlin Stone o Las hijas de Eva y Lilith pero he recibido otras recomendaciones, ¿me ayudas a escoger un libro para explorar junt@s?

 

Energía masculina y energía femenina 101

La polaridad de energía masculinas y femenina no es representativo del concepto de género. Todos, hombres, mujeres y personas de otros sexos e identidades tenemos ambas energías.

Al reconocer que tenemos el poder de saber cuál emplear y para qué momentos, se nos facilita el Camino del Ser. Nutrimos nuestro andar por la vida al cultivar la alineación, el balance.

 La energía femenina, o el yin, abarca la intuición, las curvas, la pasión, la recepción, la búsqueda de unidad. Cuando permitimos que fluya libremente en nuestro Ser veremos un flujo de emociones y sueños.

 Si la vivimos demasiado, si nos refugiamos en ella, daremos más de lo que recibimos. Nos volveremos más reaccionarios y vulnerables ante las acciones de los demás. Nos sentiremos sobre abrumados por las emociones, incapaces de actuar y de establecer límites en nuestras relaciones. Mucho tiempo en esta energía nos llevará a la tristeza, sentirnos indefensos y propensos a cambios de humor.

Si la energía femenina, de alguna forma, proyecta nuestro mundo interno y la recepción, la energía masculina da y lo materializa en el exterior. Es la representación de nuestro “yo” y la capacidad de crear, actuar, alcanzar sueños, realizar proyectos, proteger y defender lo nuestro. Es directa, lineal y objetiva.

Si sólo privilegiamos la energía masculina (lo que vemos en nuestras sociedades hoy), encontraremos que la valoración de nuestra esencia siempre debe venir de afuera. Nos sentiremos a la deriva si no conseguimos reconocimiento, alabanzas al ego, sensación de control. Nos volveremos personas muy analíticas, más pendiente de los planes y las acciones que de las emociones de las personas a nuestro alrededor. La impaciencia, la preocupación, la competición, la necesidad de control dominarán nuestro día a día.

 Por cierto, en la búsqueda de información para este post encontré un artículo de la web Hombres Revolucionantes que describe las características de ambas energías particularmente en los hombres así:

Características de la  energía femenina

  • Emociones – la energía femenina está en mayor contacto con las emociones, ese día que te levantas más triste o alegre de lo normal es porque estás más en contacto con tu femenino. Ser capaz de sentir hace que el mundo sea más interesante y no vivir como un zombie carente de emociones.
  • Amor – el objetivo principal de la energía femenina es recibir y entregar amor. La reconocerás en ti cuando tienes ganas de tener pareja o de formar una familia.
  • Fluir – la energía femenina fluye constantemente, se deja llevar, cambia a cada momento. Esta característica te puede ayudar mucho a adaptarte al mundo que te rodea y a ser más espontáneo. ¿Cuántas veces te has puesto nervioso al ver que una mujer cambiaba su decisión en un momento?
  • Compartir – una de las mayores satisfacciones para la energía femenina es la posibilidad de compartir lo que está ocurriendo es su vida. Ese día que no puedes esperar a contarle lo que te ha pasado a algún amigo o amiga estás conectando con tu energía femenina.
  • Llenarse – Cuando la energía femenina siente la carencia, busca llenarse. Puede ser yendo de compras para completar el armario o comiendo todo el chocolate de la nevera o el helado que pueda encontrar. ¿Te pasa también como hombre?

 

Características de la Energía masculina

  • Dirección – La energía masculina se siente cómoda con un propósito, poniendo el foco hacia un destino para ir hacia él. Cuando la energía masculina no tiene este objetivo se encuentra perdida. Esto te puede ayudar a conseguir cosas en la vida y a entregar al mundo la mejor versión de ti mismo.
  • Monotarea – Sólo una actividad a cada momento, si no, corre el riesgo de hacer todo mal. Parece un tópico pero es una de las cosas que te hará mantener la concentración para conseguir tus objetivos.
  • Presencia – La presencia masculina es estable, vertical, no se ve afectada con los elementos externos. Esta característica te servirá en entornos difíciles y con mucha intensidad emocional. Sobre todo si estás con alguien que entra en un tormenta emocional.
  • Libertad – El principal objetivo de lo masculino es la libertad. Esta ansia de libertad es la que te empuja a tomar decisiones, a encontrar la satisfacción en las cosas que haces por ti mismo y a crear una vida que te permita hacer lo que quieres realmente.
  • Éxito – La única medida de la vida para la energía masculina es su éxito. Ya sea laboral, económico, familiar o académico, pero siempre compitiendo por conseguir lo mejor. Bien enfocado, este aspecto masculino tiene mucho potencial y además se encuentra en la fase on track del Ciclo Masculino.
  • Vacío – Lo que la energía masculina busca cuando está mal es el vacío. Meditando, saliendo de viaje o eyaculando, pero busca la manera de no tener nada: emociones, obligaciones o límites.

¿Cómo seríamos si viviéramos alineados?

Hace unos días, cuando comencé a diseñar el Reto de 21 días: Volver al amor, encontré una gran fuente de información en la página Mastering Alchemy. En su serie “La verdad acerca de las energías masculinas y femeninas” explica en detalle cuándo hay un desbalance cómo nos sentimos y los cito aquí:

  • Femenino-Débil – Masculino-Débil
También existe el patrón de energía femenina débil energía junto a la energía creativa masculina débil. En este caso, ni están creando con facilidad y tampoco reciben ó cumplen sus deseos. Ambos están aterrorizados. Energía débil no crea; cambia de opinión con frecuencia. No hay movimiento hacia adelante. Puede ocurrir inercia. Ambos están queriendo tomar la decisión a qué película ir  y de repente es demasiado tarde. Todas las buenas películas ya han ido y venido. Como una exploración personal, es posible que ya te has dado cuenta de ésta dinámica en la vida de los demás a tu alrededor y, en definitiva, en tu propio proceso creativo. ¿Conoces a alguien que exhibe inercia y no está creando de forma plena y sabes que tiene el potencial? Tal vez no toma riesgos y utiliza vocabulario que es contraproducente?
  • Femenino-Fuerte – Masculino-Fuerte
La otra cara de esto es una creación de patrón masculino fuerte y femenino  fuerte. Una vez más, ambos se encuentran en el miedo y, a nivel interno, en una gran confusión e inseguridad. Habrá mucha competencia, empujones, incompleto  y agitación. Ambos poderes creativos aquí pueden ser muy inflexibles y obstinados. En consecuencia, mucho mueven y nada se crea. Puedes conocer  gente que hace esto en su espacio creativo. Pueden presumir y alardear y presentarse como personas con confianza que logran mucho pero en realidad, han logrado muy poco en sus vidas. Esta persona puede «saberlo todo» y discutir con todas las sugerencias que otros hacen.
Además, explica qué ocurriría si alineáramos ambas energías:
Cuando la energía masculina sana está en relación con la femenino saludable, la creatividad masculina tiene el espacio y la oportunidad de llegar a nuevas ideas y construir nuevos planes. Ahora tiene la motivación y el deseo de aprender, crecer y expandirse a nuevos reinos de posibilidades. El Masculino se siente validado y tiene el apoyo de explorar nuevas estructuras, puede construir para el femenino y crear dentro de sí. A la energía masculina sana también le encanta la energía femenina equilibrada y dice: «¿Cómo puedo elevar, nutrir y proveer para esta creatividad femenina? ¿Cómo puedo yo ayudar a crear tus sueños? Juntos podemos crear nuevos mundos «.
Cuando la energía creativa femenina sana está en alineación y equilibrio con el masculino sano, tiene la estructura y el andamiaje necesario para la creatividad. Se puede diseñar fácilmente y apasionadamente planificar, ejecutar y llevar a buen término sus sueños. Se puede concentrar plenamente en sus estudios e investigaciones; su escritura y la artesanía; la música y las matemáticas que ama tambien. Energía masculina equilibrada proporciona la estructura, la fiabilidad y la estabilidad. Es fiable; enfocada, tiene fuerza, y un sentido de protección para la energía femenina para experimentar en sí misma de forma segura y con permiso. Cuando la energía femenina está segura y tiene el permiso, es expansiva y creativa. El masculino crea un contenedor o un campo que ofrece al femenino, un espacio confiable para crear y ser feliz. Es a partir de este equilibrio de dar y recibir que se desarrolla un fluir. Es entonces que el femenino puede decir: «Me gustaría una casa.» «¿Cuándo he dicho eso?», Responde ella. «Realmente lo que quiero es ir a la playa y tener una casa allí.»

No les niego que a este punto me siento confundida porque por mucho tiempo operé con ambas energías en debilidad. No sabía que se podía estar desbalanceada de ambas. Pero sí recuerdo momentos de mi vida donde perdí rumbo, las ganas de hacer cualquier cosa, sentía demasiado y planificaba mucho pero eso no se materializaba en nada concreto.

Actualmente estoy en el proceso de equilibrar ambas energías, de entender cómo soy con ellas en balance, cuándo las puedo usar a mi favor. Desde una constelación familiar que trabajé el pasado mes de mayo, he sentido más potente mi energía masculina y sólo esta semana, con el Reto de 21 días, me puse a prestarle atención a la femenina. Como todo en la vida, no se aprende todo de la noche a la mañana.

Sin embargo, he querido compartirles esta información porque la veo muy útil para entender quiénes somos en nuestra relación con las demás personas, hacia qué giramos y cómo nos comportamos (y ellas con nosotros).

Próximamente subiré más información de rituales para equilibrar energías, mientras les comparto este enlace interesante que relata la historia de los dioses hindús Kali y Shiva y como representan la unicidad de polaridades a la perfección.